El entrenador del Paris Saint-Germain y ex entrenador del Blaugrana Luis Enrique confirmó el miércoles por la noche que sus rivales en la Champions League estuvieron interesados en contratarlo. El Atlético de Madrid contactó con Luis Enrique antes de que Diego Simeone se hiciera cargo del equipo, para guiarlos a su era más gloriosa.
Simeone se hizo cargo del Atlético a finales de 2011, reemplazando al destituido Gregorio Manzano en diciembre, antes de guiarlos a la gloria de la Europa League. Manzano había llegado ese verano, cuando Luis Enrique dejaba el Barça Atlético, y se hizo cargo de la Roma durante su única temporada a cargo del Olímpico. Presumiblemente ese era el equipo con el que se había comprometido.
“Sí, es verdad (que el Atlético de Madrid se puso en contacto con él), pero yo ya había dado mi palabra a otro club. Creo que el Atlético de Madrid tuvo suerte porque si yo hubiera ido no habría estado ni la mitad de años, ni mucho menos porque no tengo esa energía, Simeone es el mejor entrenador que pueden tener. Lleva once años, qué suerte la afición del Atlético de Madrid”, explicó Luis Enrique a la prensa.
Luis Enrique se mostró convencido de que el Atlético de Madrid estará en su mejor momento el miércoles por la noche en el Parque de los Príncipes, a pesar de los malos resultados que ha tenido últimamente ante el Lille y el Benfica, y dijo que sus jugadores individuales están al máximo nivel.
“Es evidente que va a ser un partido con muchas dificultades, contra un equipo reconocido en Europa, un entrenador con una de las carreras más largas. Uno no puede estar tantos años en el Atlético de Madrid como el Cholo Simeone si tiene un nivel muy alto”.
Ambos se enfrentaron en más de una ocasión cuando ‘Lucho’ estaba al frente del Barcelona, cuando los blaugrana lograron su segundo triplete, y el Atlético de Simeone estaba posiblemente en su mejor momento, llegando a dos finales de Champions en tres años. Sin embargo, el asturiano dijo que tenía poca preferencia sobre el estilo de juego que emplea Simeone.
“No tengo ninguna preferencia sobre el estilo de juego. Mañana volveré a ver al señor Simeone, con el que había coincidido como jugador, también como entrenador. Admiro cuando veo a un entrenador de un club grande seguir con esta energía porque es difícil hacerlo así, necesitamos mucho para estar tantos años [en un mismo sitio]. Jugaremos contra un rival que sabe lo que hace, sabemos que tenemos que jugar bien individual y colectivamente”.
