El Atlético de Madrid ha sido multado y se le ha impuesto el cierre parcial del estadio durante tres partidos después de que problemas con el público detuvieran su partido con el Real Madrid.
El partido de Liga del pasado fin de semana contra Los Blancos se detuvo durante unos 20 minutos de la segunda mitad después de que el portero del Real Madrid, Thibaut Courtois, se quejara de que los aficionados locales estaban lanzando objetos al campo. Los aficionados ignoraron las peticiones de desistimiento cuando se les pidió que desistieran a través de los altavoces del estadio, y el partido se detuvo. Ahora, la Federación Española de Fútbol (RFEF) ha sancionado al equipo de Diego Simeone con una multa de 50.000 dólares y ha dictaminado que debe cerrar la sección sur inferior del Estadio Metropolitano, donde ocurrieron los incidentes, para sus próximos tres partidos en casa.
La RFEF ha calificado desde entonces lo ocurrido aquel día como “absolutamente inaceptable y no acepta las alegaciones del Atlético sobre hechos anteriores que en ningún caso serían capaces de justificar los hechos que siguieron”.
Según los informes, el Atlético, que se ubica cuarto en La Liga con un comienzo de temporada invicto, ha dicho que ya ha identificado a un aficionado por este asunto y, posteriormente, lo ha prohibido.
El Atlético viaja a la Real Sociedad el domingo por la noche en La Liga, antes de tener su primer partido en casa bajo el cierre parcial del estadio después del parón internacional cuando reciba al Leganés el 20 de octubre en la liga.
