
El extremo del Manchester United, Antony, evitó recientemente ser procesado en Brasil por las acusaciones de violencia doméstica presentadas por su exnovia, Gabriela Cavallin.
Según el medio brasileño Portal G1, la Policía de São Paulo concluyó la investigación sobre las denuncias, pero decidió no imputar al futbolista por falta de pruebas.
El caso fue remitido a la Fiscalía, que revisará los resultados y decidirá si presenta cargos formales.
Cavallin, DJ brasileña, acusó inicialmente a Antony de violencia doméstica y lesiones corporales en junio de 2023.
Ella proporcionó fotos y mensajes privados como prueba del presunto abuso.
A pesar de estas acusaciones, la investigación no arrojó suficientes pruebas para un procesamiento.
Antony, quien ha negado constantemente las acusaciones, se enfrentó a una suspensión tanto de la selección brasileña como del Manchester United mientras se realizaban las investigaciones internas.
Posteriormente, se reintegró al equipo del Manchester United en septiembre de 2023.
Si bien la investigación brasileña concluyó sin cargos, Antony aún enfrenta escrutinio en Inglaterra.
Las autoridades continúan investigando las acusaciones relacionadas con lesiones corporales y prisión preventiva.
Las investigaciones en curso podrían afectar aún más su carrera, tanto dentro como fuera del campo.
Antony, fichado por el Manchester United por la impresionante suma de 95 millones de euros en agosto de 2022, ha tenido dificultades para justificar el elevado precio desde su llegada.
A pesar de las altas expectativas generadas por su traspaso, que lo convirtieron en el segundo fichaje más caro de la historia del club, su rendimiento no ha estado a la altura de la importante inversión realizada en él.
Esta situación no ha hecho más que intensificar el escrutinio sobre su conducta fuera del campo, afectando tanto a su reputación como a sus perspectivas profesionales.